(CEM, Ciudad de México) La Iglesia en México es consciente de la riqueza que representan los adolescentes y jóvenes para nuestra nación (cfr. Encuentro con los jóvenes Mexicanos, Papa Francisco. 2016), en comunión con toda la Iglesia Universal que se prepara para celebrar el Sínodo de los Obispos con el tema “Los jóvenes, la fe y el discernimiento vocacional” los Obispos de México hemos decidido declarar desde octubre de 2017 a octubre de 2018 el Año de la Juventud para nuestra Iglesia Mexicana, mismo que ha iniciado el pasado 22 de Octubre.
No somos ajenos ante las luces y sombras que se viven día a día en el mundo juvenil, por esta razón, queremos profundizar el tema “Los jóvenes, la fe y el discernimiento vocacional”, mediante un programa de reflexión y acción que aliente el protagonismo del joven en la misión de la Iglesia en la transformación del mundo, de sus espacios vitales y comunidades. Que a través de este proceso de reflexión – acción se susciten los agentes de cambio que requiere nuestro país promoviendo la paz, la misericordia, el bien común, el desarrollo de los pueblos, la Civilización del Amor.
Este Año de la Juventud, es el camino que queremos emprender para demostrar las grandes cualidades y talentos de la juventud, su riqueza, su esperanza, su dignidad. Que este caminar este unido al Sínodo de los Obispos, que esta aportación en este momento de la historia nos ayude a encontrar como Iglesia también las modalidades más eficaces de hoy para anunciar la alegría del Evangelio, el cual produce vida en plenitud.
Mons. Juan Armando Pérez Talamantes
Obispo Auxiliar de Monterrey y
Responsable de laDEMPAJ
Mons. Alfonso G. Miranda Guardiola
Obispo Auxiliar de Monterrey
y Secretario General de la CEM